La Secretaría de Fiscalización de la Municipalidad de Bariloche, a través de la Subsecretaría de Tránsito y Transporte, informó que luego de un extenso proceso de convocatoria, selección y amplia capacitación, se incorporaron a la estructura de esa área, 14 nuevos agentes para el control y ordenamiento vial.
Esto se dio a raíz del requerimiento del intendente de nuestra ciudad, Gustavo Gennuso, quien solicitó una mayor fiscalización en las calles debido al crecimiento vehicular y sumado a la fuerte cantidad de turismo que llega en sus automóviles y que impactan de lleno en el tránsito de la ciudad. El objetivo además, es jerarquizar y profesionalizar el recurso humano en un área tan sensible como es Tránsito y Transporte.
Al respecto, el secretario de Fiscalización, Claudio Otano, recalcó que la función que cumplen estos nuevos agentes, “tiene que ver con el crecimiento exponencial del circuito vial de la ciudad, con los vehículos locales y de turistas, a partir de la apertura total que tuvimos este verano y la enorme demanda que hay con vehículos de carga y descarga de mercaderías y de pasajeros”.
“El que ingresa, es recurso humano formado y capacitado específicamente para el control de tránsito y el ordenamiento vehicular en el casco urbano y así, a partir de una decisión puntual del intendente Gustavo Gennuso, podemos también destinar más personal al resto del enorme ejido que tenemos. De esta forma, además se descentraliza el personal a través de las delegaciones municipales, para brindar una mayor cobertura territorial y vial, que antes estaba más acotada”, aseguró.
Para tal fin, la Secretaría de Planificación y Evaluación de Políticas Públicas, que conduce Gabriela Rosemberg, inició el año pasado una convocatoria apuntando a los perfiles que den con los puestos requeridos, de acuerdo a determinadas habilidades personales, considerando que gran parte de la labor es con atención directa al público.
“Se apuntó a que no sean simplemente inspectores, sino a aprovechar esta oportunidad para iniciar la transformación de la cultura vial, como es el trato en la calle, el respeto de los conductores por las normas, por el otro, la seguridad vial como un todo”, expresó Rosemberg.
Del llamado interno, se incorporaron tres trabajadores municipales al área. Mientras que de la convocatoria externa, hubo 1500 personas que se mostraron interesadas, para los 11 puestos restantes. A partir de allí hubo un trabajo exhaustivo de evaluación psicotécnica, exámenes, resistencia a momentos de presión, trato humano, entre muchas otras tareas.
De allí surgieron también, una treintena de preventores para desempeñarse sólo por la temporada de verano, como refuerzo del orden vial en las zonas de alta congestión estival, como las playas y zonas concurridas.
Los preventores comenzaron el 1 de enero y los 14 inspectores arrancaron sus labores durante la segunda quincena del mismo mes, con más capacitaciones y exámenes en el conocimiento de las leyes viales, para luego pasar a estar cumpliendo funciones en las calles de la ciudad.