La coordinadora de la Dirección de Gestión para personas con Discapacidad, Helen Tobar, comunica a vecinos y vecinas que el objetivo de esta acción es que la sociedad tome conciencia sobre los efectos que produce la pirotecnia sonora en diversos grupos de la población y que elija para estas fiestas aquellos artefactos que generan luces y no estruendos, promoviendo una Navidad y Fin de Año inclusivo, sin afectar a terceros.
Para que la alegría de las fiestas sea igual para todos necesitamos que la comunidad ponga de su parte y se sume a la propuesta de pirotecnia cero.
Para muchos la pirotecnia es considerada aún sinónimo de fiesta y alegría, pero afecta la audición, la salud y el bienestar de la población en su totalidad, en especial a personas con autismo, asperger, trastornos sensoriales, niños, adultos mayores, mascotas y medio ambiente, por eso desde la Dirección de Gestión para Personas con Discapacidad, dependiente de la Secretaría de Desarrollo Humano Integral, te invitamos a solidarizarte con el prójimo y a que no uses pirotecnia.
Las personas con autismo reciben todos los sonidos con la misma intensidad y al mismo tiempo, lo mismo les sucede a quienes padecen trastornos sensoriales. Existen testimonios de personas que describen la pirotecnia como estar en un bombardeo. Hay familias que terminan encerradas en un baño conteniendo a sus hijos por la crisis que el efecto de la pirotecnia les genera.
Pirotecnia cero es una invitación a ser parte de un mejor fin de año para toda la sociedad porque evitar el uso de pirotecnia puede cambiar por completo la vivencia a muchas personas.
Si bien existe normativa al respecto deseamos apostar a la concientización recordando que la pirotecnia causa sufrimiento a otros. Las fiestas nos invitan a pensar en el otro y no usar pirotecnia es permitir que el festejo sea para todos.