La seguridad vial se construye todos los días, y en Bariloche también se aprende jugando. El área de Educación Vial de la Subsecretaría de Tránsito y Transporte continúa recorriendo instituciones educativas para que los más pequeños comiencen a reconocer las normas y señales que algún día guiarán sus pasos, sus bicicletas y, en el futuro, sus autos.
La semana pasada, el equipo estuvo en el Jardín Nº129 de Villa Los Coihues, en el turno mañana. Allí, entre risas, juegos y un semáforo que llamó la atención de todos, los chicos descubrieron cómo funcionan las señales básicas. Este camino sigue esta semana en la Escuela Nº71, donde los alumnos se suman con entusiasmo a la propuesta.
El compromiso es claro: reducir los siniestros viales en la ciudad. Y para eso, nada mejor que empezar desde la niñez, con dinámicas simples, cercanas y participativas. El objetivo no es sólo enseñar, sino también generar hábitos que acompañen a los chicos a lo largo de su vida.
Las actividades incluyen juegos didácticos donde se aprende a reconocer señales como el “Pare” o el “Ceda el paso”, pero también a entender la importancia de respetar a los peatones, usar el cinturón de seguridad y valorar los sistemas de retención infantil. Todo en un ambiente donde la diversión es la mejor aliada de la prevención.
La bicicleta también ocupa un lugar especial dentro de los contenidos, junto con la necesidad de usar casco y circular con responsabilidad. De esta manera, se transmiten conocimientos útiles que los niños pueden poner en práctica en su vida cotidiana, incluso antes de manejar un vehículo.
Cada encuentro es una oportunidad para sembrar conciencia y construir una ciudad con más cuidado en las calles. La Municipalidad de San Carlos de Bariloche, a través de estas acciones, busca que cada generación incorpore la educación vial como parte natural de su día a día.
El camino hacia un Bariloche más segura se empieza a recorrer en las aulas y en los patios de las escuelas. Y con cada niño que levanta la mano para responder qué significa una señal de tránsito, se enciende una luz verde hacia el futuro.