Este jueves, el corazón del Centro Cívico se convirtió en un escenario épico donde la música local fue protagonista absoluta. En el marco del “Día Speed Unlimited”, la Fiesta Nacional de la Nieve 2025 arrancó con un rugido artístico que dejó huella: casi cuarenta bandas y solistas de la ciudad desplegaron su arte con una potencia que hizo temblar hasta las montañas.
Después de la mágica Bajada de Antorchas en el Cerro Catedral, que encendió el espíritu de la 54º edición de la Fiesta, llegó el turno de que Bariloche mostrara su alma sonora. Con la vibrante conducción de Andrés Hinchaqueo y Daniel Catrilef, el escenario se transformó en un templo de celebración musical, donde cada grupo local tuvo su momento de gloria frente a un público que no paró de aplaudir, cantar y bailar.
Desde las 14 horas, las bandas locales tomaron el mando y ofrecieron un abanico de estilos que fue desde el rock más crudo hasta la danza contemporánea, pasando por coros juveniles, murga inclusiva y pop alternativo. Cada presentación fue un grito de identidad, una muestra de que Bariloche no solo tiene paisajes de postal, sino también un talento artístico que merece ser escuchado en todo el país.
La jornada arrancó con el Coro Juvenil Municipal de La Llave, que abrió el telón con armonías que acariciaron el alma. Luego, La Vienthoben y BATO (Bailar por otros) pusieron cuerpo y ritmo a la tarde. Tronador y 2 AM Band encendieron los amplificadores, Ethernal llevó al público por paisajes sonoros intensos, y la Murga del Tomate de Cre-Arte sacó sonrisas y ovaciones con su propuesta inclusiva y festiva.
Los Hienas rugieron con fuerza y dejaron claro que el rock barilochense está más vivo que nunca. Y para cerrar con broche de oro, Edelweiss se adueñó del escenario con una performance que combinó técnica, emoción y una conexión total con el público. Cada banda fue ovacionada, cada canción coreada, cada artista abrazado por una comunidad que sabe celebrar lo suyo.
Más que un día de música, fue una declaración de principios: Bariloche tiene talento, tiene pasión, y tiene una escena artística que merece escenarios grandes y públicos encendidos. La Fiesta Nacional de la Nieve 2025 arrancó con el volumen al máximo, y si esta jornada fue el comienzo… lo que viene promete ser una verdadera sinfonía de emociones. ¡Que siga el show!